7 de mayo de 2016

Reseña de un artículo antropológico dedicado al Lolita: Femenines, emocionals i felices: L’estil Lolita i les seves noves practiques respecte a la feminitat i la bellesa


Durante el periodo de 2010 a 2012 una antropóloga, Laura Porzio (CSIC) formo parte de los eventos realizados en la comunidad lolita española. De su trabajo postdoctoral, se ha publicado un artículo en Quaderns de l’institut català d’antropologia num 29, titulado:  “Femenines, emocionals i felices: L’estil Lolita i les seves noves practiques respecte a la feminitat i la bellesa”, que tiene como objetivo analizar las practicas corporales del lolita i su percepción de la belleza. La base de su trabajo, además de bibliografía extensa, se basa en  12 biografías realizadas (9 chicas y 3 chicos) y 10 entrevistas temáticas sobre las prácticas del Lolita (eventos y quedadas).

La introducción del articulo quiere mostrarnos como la percepción de las tribus urbanas o culturas alternativas, ha evolucionado con las nuevas tecnologías, por lo que, la estética y lo visual, ha primado frente la cultura musical, uno de los puntos clave en décadas anteriores. Por lo tanto, el Lolita actual queda englobado dentro de esta idea, donde la estética prima como base del movimiento: Del lolita destaca su idea visual diferente, en base a nuestros vestidos, donde convergen ideas distintas de lo que es feminidad y su representación[i].

La idea de la que parte, al analizar los vestidos, es ver como el Cuerpo es un sujeto activo de las prácticas culturales[ii]. Es una idea que la autora ya lleva a cabo anteriormente con un estudio de los Skinheads, donde analiza, a partir de los tattoos la adscripción de la juventud a un grupo, y lo que para ellos significa.

Antes de entrar a analizar las lolitas barceloninas, la autora da una breve explicación del origen del Lolita, así como de otras culturas coexistentes a esta: destaca aquí la idea de romper con la percepción tradicional del cuerpo de la mujer, que se tenía en Japón, dentro de su extremada uniformización, con lo que nace el Lolita i otras modas, que crean una nueva escala de valores influenciados por la tendencia Kawaii.

A pesar que la moda nace en los años 80, no es hasta los 2000 donde se generaliza en Occidente, gracias a Google y a las redes sociales. Según la autora, el Lolita englobaría a personas de entre 17 a 33 años, aun que, sabemos de seguro que esta franja es mucho más amplia, donde podemos encontrar miembros de la comunidad des de los 12 hasta más de 40 años. La franja de edad citada por la autora hace referencia a la franja que estudia, por lo que encontraremos un perfil muy concreto de edad, y de las conocidas como la generación 0 del Lolita[iii].

Al analizar la biografía de estas chicas, Laura Porzio intenta comprender el porqué han incorporado este estilo a su vida, incorporando así, actitudes, posturas y discursos[iv]. Destaca una idea interesante: como primer punto en común, la mayoría tiene recuerdos de soledad y distancia frente al resto del grupo durante la infancia y la adolescencia. Un segundo elemento es la conexión con la cultura japonesa antes del Lolita, relacionada con el Manga y el Anime. Destaca también la vinculación de las chicas con la cultura Gótica, con la que no se sentían en realidad del todo identificadas, ya que, al tratarse de la primera generación, no existía bastante información en referencia al Lolita.

La llegada del Lolita a la vida de estas chicas supone una revelación, como dice Libertad “El Lolita para mí es el no dejar morir a esa niña que llevas dentro y que todavía le gusta salir a jugar, ponerse un vestido bonito y dar vueltas con su falda[v] Esta visión aniñada ofrece la posibilidad de experimentar nuevas formas corporales, explica Porzio que transmiten “serenidad, tranquilidad y felicidad” en un contexto agresivo y masculino[vi].

Cuando el relato se centra en lo qué es el Lolita para sus integrantes, siempre se destaca la belleza, pero la autora, asegura que se trata de un parámetro de belleza subjetiva, es decir, se basa en una concepción propia de lo que es bello. La misma subjetividad se da cuando la autora pregunta a las Lolitas como definirían al Lolita. Ante esta cuestión, no hay una respuesta clave, si no que es muy normal aludir al hecho que para cada una el movimiento es algo distinto. Para la autora, pero, lo más curioso no es la disparidad de definiciones, ya que, al final todas aluden a unos trazos comunes, si no idea antagónica que existe entre el movimiento estético, artístico y cultural y el vestir Lolita. Para la autora es sorprendente el hecho que, a pesar de que todas las lolitas cuentan con mucha nostalgia todo lo referente a su primer vestido, o cuando se ha adquirido algo, no se reconoce al vestido como un elemento clave del movimiento, a pesar que la primera vez que se viste de Lolita en sociedad, es un hecho relevante en el relato de la biografías. Libertad, una de las entrevistadas nos da luz sobre esta cuestión: “(…) muchas niñas están aquí porque les gusta la forma de vestir y punto pelota. Ellas no quieren ni crear arte, ni filosofar de la vida, ni nada, pero hay otras que estamos ahí dentro porque lo sentimos como una parte de ti, no sólo una prenda de ropa”.

No se puede separar el concepto del arte de la ropa, ya que en realidad, para ser Lolita necesitas vestir Lolita, a pesar de las concepciones emocionales que produce las ideas, lo que realmente es parte de la belleza del Lolita es el vestirlo. Para la antropóloga, pero, lo más paradójico no es ese elemento, ya que la ropa es un elemento clave de las tribus urbanas, si no que, realmente las Lolitas aluden que el Lolita es una moda, no una cultura juvenil, ya que “no hay ideología, no hay música, sólo moda[vii]: ¿este debate es latente en todos los foros y artículos de blogs: es realmente el lolita sólo moda o es algo más? Es algo a lo que la autora no ha podido contestar, y es algo que nosotras tampoco podemos contestar.

En sus conclusiones Porzio hace una comparación entre su estudio y un trabajo antropológico del Lolita japonés titulado undressing and dressing a loli: a search for the identity of the japanese lolitas, en el que se ve el Lolita como una estética contra la cultura dominante a partir de la infantilización y la carnavalización, mientras que las Lolitas estudiadas por L. Porzio, incorporan a su biografía el Lolita como un elemento identitario y cuotidiano, y no es un elemento de escape, como comenta la autora, si no, que persiguen una idea de belleza, definiendo su presentación social del cuerpo en base a esta moda, sin eludir las responsabilidades y su vida cuotidiana[viii].

Bibliografía
PORZIO, L. (2010) “Pensar el cos i practicar el cos: Construir una identitat pròpia a partir del cos i de les experiències vitals” dentro de Revista d’Etnologia de Catalunya num. 36 pp. 69 – 80 Barcelona.
PORZIO, L. (2013) “Femenines, emocionals i felices: L’estil Lolita i les seves noves practiques respecte a la feminitat i la bellesa” dentro de Quaderns de l’institut català d’antropologia num 29 pp.173-194 Barcelona




[i] PORZIO, L. (2013) “Femenines, emocionals i felices: L’estil Lolita i les seves noves practiques respecte a la feminitat i la bellesa” dentro de Quaderns de l’institut català d’antropologia num 29 Barcelona P. 174
[ii] Op cit. P. 176
[iii] Las primeras lolitas en España
[iv] Op Cit p. 183
[v] Op cit. P. 186
[vi]  ibidem
[vii]Op cit. P. 191
[viii] Op cit.P. 192

1 comentario:

  1. Me ha parecido muy interesante, si bien me siento identificada con algunas cosas, con otras no tanto. Creo que para las que es algo mas que una moda realmente no llegamos a ser capaces de explicar lo que es el lolita, porque a veces es algo tan profundo e intimo que tienes que llegar a sentirlo para poder hacerte una idea de lo que significa o simboliza para algunas personas. Aun aso creo que es un trabajo genial :)

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